lunes, 17 de octubre de 2011

El precio del saber

Aquí os dejo este artículo de opinión publicado en El Correo de Andalucía por Rosario Valpuesta. Comparto enormemente con la periodista la idea de que en las universidades no solo se adquieren aptitudes profesionales, a los estudiantes también se les prepara para desenvolverse en la sociedad que les rodea y ser capaz de resolver los problemas que en ella se planteen. Desde mi punto de vista, el Gobierno, antes de hacer recortes en las universidades, debería pararse a pensar que el que los ciudadanos del Estado reciban una educación y formación adecuadas conlleva a que el país progrese.
¿Y vosotros qué opináis? ¿Es verdad que se está extendiendo la opinión de que en las universadades se pierde el tiempo y que no se aprende nada de interés para la sociedad para hacer recortes en ellas? ¿Creéis que las ciencias sociales están devaluadas en nuestro país o pensáis que podríamos prescindir de ellas?

1 comentario:

  1. Me parece muy adecuado y provocativo el tono irónico que usa Rosario Valpuesta en todo su artículo criticando, con toda la razón, las entidades financieras y las prioridades del Gobierno.

    Es impresentable que se hagan recortes en educación, que ese dinero se considere prescindible, ya que ese es el pilar fundamental para formar a ciudadanos informados, libres y capaces de servir como motor de prosperidad del país, pero los políticos en lo que reparan es en que ese tipo de ciudadano precisamente por estar informado tiene capacidad de opinar, organizarse y protestar y, como todos sabemos, eso al Gobierno no le gusta precisamente. También opino (espero) que la cosa no llega al extremo de que se hacen los recortes en educación para poder manipularnos y someternos más fácilmente, pero es verdad que creo que influye en la importancia que se le da a la educación.

    Pienso que antes que para las entidades bancarias que han hecho que el país esté en la ruina, el dinero debería ir claramente a la educación. Aunque es verdad que siempre se relaciona la universidad con fiestas y diversión, esto no significa que no cumpla su función de enseñar, y no solo conocimientos, sino también valores muy importantes que ya menciona Mª Ángeles arriba. Además, opino que todas las profesiones son importantes y necesarias, tanto las sociales como las científicas, a pesar de lo infravaloradas que están las primeras en nuestro país.

    Por todo esto,estoy de acuerdo con la autora en que, por mucho que intenten los políticos, el saber no tiene precio.

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